Los Juegos Olímpicos (JJ.OO.) comienzan por ser una catástrofe económica para los restauradores parisinos , víctimas de una caída alarmante de la frecuentación de bares y restaurantes. Varias asociaciones de comerciantes, restauradores, bares y clubs, han publicado un rosario de comunicados oficiales, denunciando al unísono el mismo desastre: «A pesar de todas las previsiones optimistas, la actividad está paralizada y ha retrocedido desde mediados de junio. Muchos profesionales sufren una caída del 30 al 35 % de la cifra de negocios... Читать дальше...