Sobre el tapete azul del estadio Yves-du-Manoir desplegó Países Bajos su artillería y España no tuvo más remedio que acatar la ley del más fuerte. No hubo discusión, pese al entusiasmo del equipo de Max Caldas , y los soldados naranjas ocuparon todos los espacios, se impusieron en casi todos los duelos y marcaron todos los goles. España, que acababa de firmar la gesta de eliminar a Bélgica, tuvo que rendirse ante los neerlandeses y despedirse de la final olímpica. Pero la medalla sigue estando ahí ... Читать дальше...